¡Hola, papá! ¿Qué tal estás? Espero que sigas feliz con esas vistas maravillosas que ahora puedes contemplar desde el amanecer hasta que el sol empieza a esconderse y deja esa luz anaranjada en el cielo y ese último rayo verde que da paso a la oscura noche, esa noche que ahora me aterroriza que llegue sabiendo que ya no estás.